miércoles, 16 de mayo de 2007

Casiopea II


Desaparecí en la niebla
la tremenda confusión del largo encarcelamiento
los gritos ahogados y la piel quebrajada por la sal.

Aquel dial el sol no era de justicia
la mar seguía revuelta
giraba en su caverna
una y otra vez sobre si misma.

Se devoraba a sí
era tan hermoso
lástima que no pudieras venir.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Nerte.

Gracias por tu visita y tu comentario.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Que alguien no esté no siempre es una lástima... A veces no tener lo que se desea puede ser un verdadero golpe de suerte.

P.D.- Gracias por visitar mi blog.

Anónimo dijo...

Lástima, sí.

Cadena Blog dijo...

Hola, ya fuiste agregado a mi directorio personal de blogs en español, gracias por sumarte.

Katmarova dijo...

Me gusta la imagen de la mar dando vueltas en la caverna.

Saludos

Melissa dijo...

Apoyo a R en su comentario. Saludos y gracias por pasar a mi blog :)